Título: Cortos con Background Music (6)
Personajes: Aimée Reed, Leonardo Ramírez. Aims/Leo implicado en algunos.
Advertencia: Sin orden cronológico aparente. Los que se relacionan están indicados.
#6: All These Things That I've Done (The Killers)
I got soul but I'm not a soldier
I got soul but I'm not a soldier
I got soul but I'm not a soldier
A veces, Aimée desaparece.
Al principio, Alex siempre salía en su busca y le hablaba incesablemente cuando la encontraba, siempre sobre cosas mundanas y poco interesantes que Aimée nunca escuchaba, pero ponía su mejor cara de interés — demasiado consciente de las reglas de etiqueta como para querer parecer descortés. Cuando era Cony, Aimée escuchaba un poco más, le sonreía y respondía las preguntas que le hiciera la menor, pero siempre con ese aire de lejanía, la cabeza en otra parte.
Después de un tiempo, dejan de hacerlo.
Entienden que es un tiempo que necesita para reencontrarse consigo misma, porque llevar la vida que llevan siempre termina pasándoles la cuenta, y cada uno de los agentes en OMAS lidia con ello como mejor puede.
Alex camina durante las mañanas o en las noches, cuando tiene tiempo; observa la ciudad, las personas, el tráfico — un observador en el frenesí que significa la hora peak de Santiago — mira inmutable la rutina de toda la gente que no tiene la más mínima de todo lo que sucede; se convence de que ésta es la razón porque OMAS existe y él está en ella.
Cony estudia, aprende idiomas, contacta agentes de otros países y habla con completos extraños con los que no tiene nada en común excepto OMAS. Siver escucha música con los audífonos puestos mientras arma y desarma computadores para volver a armar y desarmarlos, la lógica y el razonamiento tras sus movimientos una comodidad confortante en comparación a lo que es la vida allá afuera. Antonia lee novelas, poemas, Shakespiere y Molière, Mario Benedetti y T.S. Eliot, escapa sus preocupaciones al sumergirse en los mundos imaginarios de alguien más para no tener que pensar en el suyo propio. Leonardo tiene prohibido acelerar en las calles desde que cerró su trato con OMAS (a menos que estuviera en una misión) así que en cambio, juega videos, colecciona consolas, pasa horas frente a la PlayStation corriendo contra la computadora, acumula semanas de juego en un RPG del computador, juega golf en el Wii. Jorge tira dardos en un pub cercano donde la cerveza es buena y el ruido de la música es más fuerte que los pensamientos en su mente.
Aimée desaparece.
Personajes: Aimée Reed, Leonardo Ramírez. Aims/Leo implicado en algunos.
Advertencia: Sin orden cronológico aparente. Los que se relacionan están indicados.
#6: All These Things That I've Done (The Killers)
I got soul but I'm not a soldier
I got soul but I'm not a soldier
I got soul but I'm not a soldier
A veces, Aimée desaparece.
Al principio, Alex siempre salía en su busca y le hablaba incesablemente cuando la encontraba, siempre sobre cosas mundanas y poco interesantes que Aimée nunca escuchaba, pero ponía su mejor cara de interés — demasiado consciente de las reglas de etiqueta como para querer parecer descortés. Cuando era Cony, Aimée escuchaba un poco más, le sonreía y respondía las preguntas que le hiciera la menor, pero siempre con ese aire de lejanía, la cabeza en otra parte.
Después de un tiempo, dejan de hacerlo.
Entienden que es un tiempo que necesita para reencontrarse consigo misma, porque llevar la vida que llevan siempre termina pasándoles la cuenta, y cada uno de los agentes en OMAS lidia con ello como mejor puede.
Alex camina durante las mañanas o en las noches, cuando tiene tiempo; observa la ciudad, las personas, el tráfico — un observador en el frenesí que significa la hora peak de Santiago — mira inmutable la rutina de toda la gente que no tiene la más mínima de todo lo que sucede; se convence de que ésta es la razón porque OMAS existe y él está en ella.
Cony estudia, aprende idiomas, contacta agentes de otros países y habla con completos extraños con los que no tiene nada en común excepto OMAS. Siver escucha música con los audífonos puestos mientras arma y desarma computadores para volver a armar y desarmarlos, la lógica y el razonamiento tras sus movimientos una comodidad confortante en comparación a lo que es la vida allá afuera. Antonia lee novelas, poemas, Shakespiere y Molière, Mario Benedetti y T.S. Eliot, escapa sus preocupaciones al sumergirse en los mundos imaginarios de alguien más para no tener que pensar en el suyo propio. Leonardo tiene prohibido acelerar en las calles desde que cerró su trato con OMAS (a menos que estuviera en una misión) así que en cambio, juega videos, colecciona consolas, pasa horas frente a la PlayStation corriendo contra la computadora, acumula semanas de juego en un RPG del computador, juega golf en el Wii. Jorge tira dardos en un pub cercano donde la cerveza es buena y el ruido de la música es más fuerte que los pensamientos en su mente.
Aimée desaparece.
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